En este artículo te vamos a mostrar cuales son dos de los peores enemigos a los que se puede enfrentar el AOVE.
La luz y el aire son los dos peores enemigos del AOVE. Toda grasa vegetal sufre un rápido y acelerado deterioro cuando se expone a la acción de la luz y el aire. En el caso del AOVE, especialmente en aquellos procedentes de variedades de aceituna arbequina, este proceso fotoxidativo destruye las vitaminas liposolubles (A y E) y los antioxidantes (polifenoles…) en poco más de 90 días. Por eso hay que elegir envases 100% opacos y al vacío o con atmósfera inerte mediante un gas incompatible con el oxígeno.