Sabemos que el queso es un alimento sólido obtenido por medio de la maduración de la cuajada de la leche una vez que se ha eliminado el suero.
Las diferentes variedades de queso que existen dependen del origen de la leche empleada, de los métodos de elaboración seguidos y del grado de madurez alcanzada.

¿Qué tipos de queso hay?
La base del queso es la leche (de cabra, de vaca, de oveja o de cualquier otro mamífero rumiante).
Pero aunque el ingrediente principal sea siempre el mismo, hay muchos tipos y variedades de queso, que varían en función del:
- Lugar de origen del animal,
- De su contenido en grasas,
- De su grado o tiempo de curación,
- De los diferentes tratamientos en el proceso de creación o
- Incluso de la dieta que ha seguido el ganado utilizado.
Como resultado, cada estilo de queso presenta un aspecto, una textura y un sabor totalmente distinto y único.
Si nos referimos a su color amarillento, este se debe a el β-caroteno se encuentra en grandes cantidades en la hierba. Lo que significa que cuanto más hierba coma la vaca, más β-caroteno termina en la leche, y por tanto más amarillo es el queso.
Alguno de los tipos de queso son:
Queso cheddar
Originario de Somerset, un condado de Inglaterra, aunque en la actualidad se elabora en todo el mundo. Es un queso duro elaborado con leche de vaca que necesita uno o dos años de maduración, aunque se puede vender a partir de los 3 meses.
Cuanto más curado sea, más potente será su sabor y su color (anaranjado).
Debido a que es un queso muy sabroso se puede consumir solo, aunque también está muy presente en los restaurantes de comida rápida puesto que combina perfectamente con salchichas, patatas y hamburguesas, ya sea en lonchas o en salsas. Es bastante calórico (390 calorías por cada 100 gramos).
Queso gouda
Su nombre se debe a la ciudad holandesa donde se produce.
Es un queso de sabor suave, agradable, de color amarillo claro y con algunos agujeros pequeños e irregulares.
Cuando está muy maduro puede servirse frío y tomarse solo. En el caso de que aún sea joven, es más recomendable rallarlo, cortarlo en lonchas o tomarlo caliente, en platos gratinados, bocadillos calientes o recetas de horno.
Una ración pequeña de unos 30 gramos aporta 100 calorías, aunque también calcio y potasio.
Queso azul
Al igual que el roquefort o el gorgonzola puede elaborarse tanto con leche de vaca, de oveja o de cabra.
Su color, que varía entre el azul y el gris verdoso, se debe a la presencia de mohos derivados del uso del hongo penicillium roqueforti.
Los quesos azules tienen un fuerte olor y sabor y suelen tener una textura cremosa, por lo que se usan para untar o para elaborar salsas, que combinan muy bien con carnes o en la elaboración de pizzas.
También se suele servir en tablas de queso, acompañado de frutos secos como las nueces.
Queso mozarella
Típico de la cocina italiana y suele elaborarse con leche de búfala.
Es bastante graso, y se utiliza tanto fresco (en ensaladas) como tierno o seco.
Su uso más común es para la fabricación de pizzas, donde se utiliza rallado para gratinar o colocado sobre la masa antes de que sea horneada.
Tiene menos sabor en comparación con otros quesos, pero su textura suave lo convierten en un ingrediente ideal para combinar en muchas elaboraciones.
Provolone
Es un queso semiduro que se produce sobre todo en el sur de Italia con forma asalsichada.
Es de textura firme pero suave.Por lo general se consume cortado en rebanadas.
Su sabor hace que sea muy empleado en la cocina como ingrediente en algunos platos, desde la elaboración de ensaladas hasta acompañamientos diversos.
Otras formas en que se suele comer es a la parrilla, condimentado con diferentes especias, y se recomienda tomarlo con un vino blanco.
Queso de cabra,
También denominado chèvre. Es cualquier queso hecho con leche de este animal.
Normalmente estos quesos tienen más proteínas que los elaborados con leche de vaca y se digieren mejor. También tienen más consistencia y menos colesterol y grasas.
El queso de cabra se ablanda cuando se calienta, pero no se funde, por lo que es ideal para tomar de forma templada. De sabor intenso, combina muy bien con productos dulces, como el dulce de membrillo, la mermelada o la cebolla caramelizada.
Queso manchego
Queso español elaborado con leche de oveja de raza manchega.
Puede incluirse en una tabla de quesos, formar parte de ensaladas y tapas o tomarse acompañado de membrillo o frutos secos.
Es ideal para conservarse en aceite de oliva y cuanto mayor es su tiempo de curación, mayor es su sabor. Es un queso que marida muy bien con vinos tintos.
EStas son algunas curiosidades sobre el queso que hoy te hemos querido mostrar
En el momento en que comence a hacer mi propio queso, gane mucha confianza leyendo y estudiando. Recomiendo dedicar tiempo a leer buenos articulos por muy duro que sea al principio. Yo empece con articulos sencillos como los de esta pagina